One Night Ultimate Vampire: un mordisco rapidito.
Ted Alspach y Akihisa Okui, 2015 – Bézier Games

One Night Ultimate Hombre del Saco, próximamente.
Si de algo sabe Ted Alspach es de ordeñar vacas gordas. Uno puede decir que su Hombre Lobo: edición definitiva es al fin y al cabo un poner en bonito el Hombre-Lobo de toda la vida, que Una Noche: el Hombre Lobo es ponerle dos personajes y una aplicación narrada a un juego japo, o que en Castles of Mad King Ludwig se limita a ponerle formas a las losetas de Suburbia, pero la cosa es que le sale bien, y el producto final suele valer bastante la pena. Ahora le da otra vuelta a la manivela y ¡zas!, sale este One Night Ultimate Vampire en el que cambia a los hombres-lobo por vampiros y a poner el cazo. Basándose en uno de los juegos que más lo han petado en el género de los roles ocultos tampoco puede estar tan mal y, como mínimo, puede servir como expansión para el básico. ¿O no?
Si ya habéis jugado a Una Noche: el Hombre Lobo, poco os va a sorprender aquí: un rol para cada jugador, tres al centro de la mesa, a cerrar los ojos e irlos abriendo según te llaman para hacer cosas nazis sobrenaturales. Los roles van a ir cambiando, se van a ver algunas cartas y hale, luego abrimos todos los ojos y discutimos quién es quién hasta que toque votar quién es, esta vez, el vampiro. Según quién haya recibido más votos, ganan los vampiros, los aldeanos o algún otro marginal con sus metas especiales. Y si esto no os suena divertido, dadle una oportunidad y a ver si tenéis lo que hay que tener para jugar sólo una partida, porque la chispa principal está en que no puedes estar seguro de tener el mismo rol que tenías al principio de la partida, así que hay que sonsacar a la gente para ver qué ha pasado en esa noche loca sin tampoco dar demasiadas pistas, como en un grupo de Whatsapp después de una cena de empresa que se ha ido de madre.

¡Tres! ¡Tres juegos a partir de la misma idea! ¡Muajajajaja!
¿Qué incluye esta versión con vampiros? ¿Purpurina y personajes planos tal vez? Va a ser que no, que estos son vampiros de los de colmillos largos y dar sustete en lugar de vergüenza ajena. Lo que tenemos aquí es una nueva fase, el atardecer, en la que vamos a jugar, aparte de con nuestras cartas de rol, con unas fichas de marca que se van meneando y pueden hacer que te conviertas en vampiro, pierdas tu poder especial, te enamores de otro personaje y cosas así, añadiendo una capa más de juego. Y claro, la pregunta es si darle una vuelta de tuerca más a un juego que tiene como selling point principal lo sencillo que es de pillar y viciarse a él no va a ser un poco demasiado y ya tengas que estar más a los detallitos de reglas que a sembrar cizaña y trolear a tus amiguetes, que es lo que mola.
Y no, en un principio no es tan complejo, más que nada porque lo que nos ofrece One Night Ultimate Vampire es simplemente un cambio de foco: ahora la mayoría de roles lo que hacen es menear las marcas de un lado a otro, y hay roles que se echaban de menos en el juego original si eras un veterano del Hombre-Lobo clásico como Cupido y que ahora ya tenemos ahí dándolo todo. Si acaso, eso sí, lo que tenemos que hacer es tener mucho más cuidado a la hora de evitar ruidos delatores: no juguéis muy arrimados, dad golpecitos en la mesa de vez en cuando y, si podéis, usad un mantel o tapete que amortigüe un poco.
A la hora de quedarse uno u otro, no sabría decidirme: por un lado, la versión lupina es más clásica en cuanto a tema, y más directa y fácil de explicar. Por otro, los vampiros tienen roles muy interesantes y, una vez ya le has dado mucho a uno, hay interacciones a las que se puede sacar mucha miga y pueden tener más éxito en un público más “experto”, pero ni los vampiros son tan complejos ni los hombres-lobo tan vainilla, así que al final es todo una cuestión de cuál es tu bicho nocturno favorito.

Un juego de los que te dejan marcado. #patumchasss
Lo que sí no he hecho aún, y no sé si me atreveré algún día, es a mezclar los dos tal y como lo sugieren en la última página de las reglas, porque ahí sí que veo fácil no entender algún tipo de interacción, y eso en un juego que tendría que hacerse invisible para que el componente conversacional brille realmente puede ser un tanto chof. Si alguien le ha echado el valor que yo no he tenido, que nos cuente, porfis.
En cualquier caso, vampiros o perretes, en el sabor que quieras, un One Night tiene que estar en tu colección sí o sí, que tampoco ocupa tanto. Diría que el único motivo para no tenerlo sería no tener amigos, pero si apareces en un bar o convención con uno bajo el brazo seguro que se te empieza a arrimar la gente adecuada, así que todo son ventajas.
Te gustará si: le has dado ya mucha caña a la versión de hombres lobo y quieres una dinámica parecida pero que te resulte fresca.
Lo odiarás si: estás rodeado de torpes que se incriminan a la hora de menear las fichas de marca.
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