Las Mansiones de la Locura (Segunda Edición) – Susto y/o muerte.
Mansions of Madness: Second Edition. Nikki Valens, 2016 – Fantasy Flight Games (EDGE Entertainment)

El título es porque puedes vivir dentro del cajote.
Qué chulos son los juegos de rol. Cómo mola eso de preparar una historia, crear tus propios protagonistas para esa historia y juntarte con amigos a convertir esos apuntes en recuerdos imborrables. Y qué guarrada es tener que volver al mundo real y darte cuenta de que tienes un examen para el que estudiar, o toca ir a trabajar todos los días y ya no tienes tiempo para prepararte la partida del viernes o, peor aún, ni siquiera puedes quedar el viernes, mejor el que viene pero eso de jugar hasta las tres de la mañana no va a poder ser que el sábado toca madrugar para hacer la compra. Ser adulto apesta.
Ahora, los señores de Fantasy Flight Games hace tiempo se dieron cuenta de que, si bien los frikis de ayer que ahora tienen trabajos que les roban el tiempo, sí tienen algo que antes no tenían: dinero. Sumaron dos y dos y dedujeron que más de uno estaría encantado de dejarse los billetes en algo que le permitiera rememorar esos momentos sin tener que preocuparse por preparar la partida con días de antelación: abrir la caja, montar la casita de muñecas como hacíamos con HeroQuest y a correr. Empezaron con un juego basado en Doom (del que en poco tiempo veremos una segunda edición), siguieron con la primera edición de Descent, y continuaron con Las Mansiones de la Locura, porque si algo merece la pena, seguro que mejora añadiendo a Cthulhu.
Había un problema con Las Mansiones de la Locura, sin embargo, que de algún modo le impedía despegar del todo: sí, el tablero y las miniaturas estaban muy bien, y tanto investigadores como maloso tenían mil opciones, pero quizá es que mil opciones eran muchas, y cuando tocaba montar el tablero, poner cartitas en las habitaciones, escoger un final alternativo, patatín y patatán al final tampoco ahorrabas tanto tiempo en comparación con echarte una partidaca como Azathoth manda a La Llamada de Cthulhu, con el agravante de que al final acababas viéndole los hilos a la marioneta y un juego de investigación y horror se acababa convirtiendo en moverte hacia la habitación con el montón de cartas más grande, que ahí era donde estaba la mandanga. Los fans acudieron al rescate y empezaron a crear escenarios alternativos en los que se recuperaba ese componente de investigación y misterio que se le supone a un juego de este estilo, pero claro, lo que hacen los fans no lo cobran en FFG, y eso había que arreglarlo de algún modo y, con la ayuda de la tecnología del siglo XXI, ahora nos presentan esta nueva edición.

La tablet no viene incluida aunque, por el precio, uno podría pensar que sí.
Aparte del aumento en el tamaño de la caja y en el precio, la principal novedad que nos ofrece esta reimplementación de Las Mansiones de la Locura es que nos sustituye al guardián de los arcanos por una aplicación para móvil o tablet, y aquí es donde sacamos las antorchas y los rastrillos para protestar en plan luditas que ya está bien de pretender utilizar tecnología actual en lugar de limitarnos a cartones y dados como hacían nuestros abuelos…, hasta que nos da por probar la aplicacioncita de marras y nos quedamos con el culo torcido.
Lo que hace la aplicación es, en primer lugar, decirnos cómo preparar el mapa. Empezamos viendo una o dos losetas y nos va contando “pon aquí una ficha de búsqueda, pon acá una de investigación, aquí un Profundo…”. Cuando nos da por examinar una estantería llena de objetos raros, hablar con un personaje o abrir una puerta, se lo contamos a la aplicación y ésta nos dice qué pasa, si tenemos que colocar algo más en el tablero o si nos volvemos una miajita locos, y esto es una auténtica maravilla. Ponerse a jugar es tan sencillo como escoger un escenario, plantar una loseta, tres fichas y cuatro cartas y hale, a ver qué pasa. Que cada cosita que haces tenga su texto de ambientación y mientras tanto estés escuchando musiquita ambiental también ayuda a meterse en el tema, y cuando todos los investigadores han hecho sus cosas siempre pasa algo en plan suceso aleatorio que ayuda a que no des nada por sentado.

Como en la primera edición, de vez en cuando toca resolver puzles, pero esta vez los lleva la aplicación. Otro puntazo más.
Jugando a Las Mansiones de la Locura me he sentido como en aquellas partidas de antaño con un HeroQuest tuneado en el que siempre había una sorpresa a la vuelta de la esquina, con la única diferencia de que ahora las sorpresas me las da un iPad en lugar de un chaval con granos y gafas de culo de vaso (básicamente yo), y de que no me veo abocado a la Maldición del Comprador del Juego que dice que ay del que se compre un juego de mazmorras o similares porque le tocará ser siempre el amo del calabozo. Pero no todo es alegría y felicidad, y aquí nos encontramos también algún que otro punto negro.
El primer problema es más bien un rasgo del juego, y es que tienes que estar ahí por la historia. Cada vez que realizas una acción como atacar a un monstruo, echar un vistazo a través de una ventana o leer un viejo diario olvidado por el antiguo dueño de la casa vas a tener un párrafo que leer y, como seas de los de “paso del texto de ambientación, dime qué dado tengo que tirar” te vas a perder mucho, que ese texto forma parte de la partida al mismo nivel, si no más, que cualquier otro elemento. Jugar un escenario de Las Mansiones de la Locura para mí es una gozada del mismo modo que lo es explorar Londres en una partida a Sherlock Holmes: Detective Asesor, que tiene más que ver con la historia que descubro y los detalles que hilo que con si consigo tirar más dados en una prueba o, ya que estamos, si tengo éxito o no. Si sólo estás interesado en el desafío mecánico, Arkham Horror: El juego de cartas te va a dar más alegrías sin lugar a duda.

Ah, pero, ¿hay que leer? ¿Qué es esto, una mansión o una biblioteca?
Otro obstáculo, este sí más serio, es el de la rejugabilidad. Las Mansiones de la Locura es un juego basado en la historia que vas desvelando y, una vez superado un escenario, aunque la aplicación hace un buen trabajo a la hora de ofrecerte cada vez una disposición distinta de losetas y hacer que pasen cosas distintas en cada partida, al final estás releyendo el mismo libro o, más bien, viendo un remake de la película original que sí, te va a hacer pasar un rato entretenido, pero que no tiene la misma emoción ni de lejos. La aplicación te ofrece cuatro escenarios distintos, algunos de ellos para jugar en varias sesiones, y con esto probablemente tengas para echarte unas diez o doce partidas antes de que la cosa se empiece a tornar repetitiva. Y si un problema muy parecido tenía la primera edición, la forma de resolverlo es distinta: lo que antes era cuestión de ampliaciones físicas y, sobre todo, de escenarios creados por otros jugadores, aquí todo apunta a que vamos a tirar de descargas en la aplicación disponibles previo pago, que la policía no es tonta.
Y sí, al final estamos ante un juego, sobre todo, muy caro y que amenaza con hacerse más caro todavía a base de contenido descargable y ampliaciones, y por poner más pegas las miniaturas no son nada del otro mundo comparadas con lo que nos encontramos hoy en día por esos precios, y las bases de los monstruos son demasiado trasto, pero aun y con todo para mí, Las Mansiones de la Locura es el mejor juego de mesa que puedes encontrar si lo que buscas es vivir una historia de terror. Ahora el problema es hacer hueco en la estantería para este mostrenco, pero mejor tener un juegazo que dos reguleros, así que yo feliz.
Hola Betote,
Juegué una partida en casa de un amigo y me pareció que mejora mucho la experiencia con respecto a la edición anterior.
Me hubiera gustado que los textos fuesen narrados en vez de tener que leerlos, porque aumenta mucho la ambientación. Supongo que son malos tiempos para contratar doblajes…
Hola,
Habíamos comprado la 1ª edición porque nos encanta el género de terror pero nunca le hemos podido sacar partido porque a ninguno se nos da bien lo de ser el “amo del calabozo”, como tú dices. Jo, pero cualquiera se compra ahora esta 2ª edición, que valdrá una pasta… Oye, y esa expansión / 2ª edición de Dead of Winter (La larga noche) ¿la has catado ya? Si alguien no tiene el original ¿le merece más la pena comprar La larga noche, que parece que lleva todo lo anterior más algunos extras? Un saludo, y muchas gracias por tus reseñas insuperables.
La Larga Noche la tengo en la recámara. En casita está, ahora toca probar lo que trae nuevo 😉
Pues mira, justamente a mí lo que me hacía gracia de la 1ª edición era el tema de un master ya que le daba un toque más rolero como si fuera una partida de la Llamada en tablero. Lo malo es que al final daba un poco igual la trama de la aventura ya que llegaba un momento en el que se revelaba el objetivo y ya la historia pasaba a un segundo plano (por no decir que desaparecía).
Por cierto un juego de este estilo, aunque no tenga tanta presencia física como este es el Traidor de la Casa de la Colina con (si no recuerdo mal) 50 historias segúna la combinación de personajes, objetos, eventos y localizaciones mostrados mientras exploras la casa en cuestión.
La cosa es que, como dices, la sensación era “como si”, y esa mitad de partida en la que se convierte en un corre-que-te-pillo. Si requiere de tanta preparación como una partida de rol y me da una sensación descafeinada en comparación con ella, ¿por qué no jugar a rol directamente?
Betrayal at the House of the Hill es un juego simpático, y desde luego en variedad pocos le ganan, pero tiene varios problemillas de equilibrio, mucha disparidad entre escenarios y el problemilla del idioma, y eso lo mata un poco en mi opinión.
¡Gracias por pasarte y comentar! 🙂