Frog Menu: ¿vas a comerte eso?

Jorge Piñan e Ignacio Sánchez Usera, 2015 – Edigráfica Games

Página en BoardGameGeek

Aquí hay una rana que a lo mejor no debería seguir comiendo, y no miro a nadie.

Aquí hay una rana que a lo mejor no debería seguir comiendo, y no miro a nadie.

Frog Menu es un juego con unas ilustraciones bastante simpáticas, en un formato de caja pequeña que se puede llevar de un lado a otro sin problemas y el gramaje de las fichas es decente. Si te parece que hablar mal de un juego, especialmente de uno publicado por una editorial pequeña y patria, no está bien y que todo esfuerzo por publicar un juego de mesa merece un respeto, te recomendaría que no siguieras leyendo y te quedaras con estos datos positivos. Nos vemos el próximo día con otra reseña.

Hasta luegui, besis.

Hasta luegui, besis.

Ahora que estamos solos, os comento: Frog Menu es la mayor tomadura de pelo en forma de cartulina a la que me he enfrentado en mucho tiempo, uno de estos casos de publicar lo que sea deprisa y corriendo que total, los frikis compran cualquier chorrada. Y me molesta especialmente porque la idea inicial no suena nada mal: cada jugador tiene una rana que se va moviendo por el tablero quedándose las fichas en las que se posa, como en ¡Pingüinos!, con el puntito adicional de que tu movimiento se ve determinado por la ficha en la que estés. Uno piensa eso y oye, la cosa puede tener su punto. Pero ¡ay!, cuán equivocados estaríamos.

Empezamos más o menos bien: se cogen fichas de bichitos al azar en función del número de jugadores y se colocan formando el tablero. No es mala idea porque así se evita que se memoricen movimientos, pero la risión comienza cuando nos dicen que pongamos las fichas de inicio también al azar, pudiendo darse situaciones tan divertidas como que alguien no pueda hacer ningún movimiento por haber salido su ficha encajonada entre otras. Muy bien todo. Que los movimientos impresos en las fichas se hayan puesto tan claramente al azar que no se han dado cuenta de que han plantado como distintas matrices cuyos puntos de inicio y final son idénticos(el trayecto no importa porque las ranas se mueven “saltando”) es simplemente otro detallito más que ya ni asombra siquiera.

Encuentre las diferencias.

Encuentre las diferencias.

Pero bueno, pongamos que ignoramos estos graves errores de diseño y, por algún extraño motivo, conseguimos terminar la partida. Ahora toca puntuar… Y para ello nos dan una tabla sin explicación alguna, en plan “5 insectos iguales 50 puntos, 5 diferentes 40 puntos”… Sin dar ningún otro detalle. ¿Qué se supone que tenemos que hacer, ordenamos todos los insectos, escogemos sólo la mejor combinación? ¿Podemos usar un insecto para dos criterios distintos? Si no, ¿dónde lo colocamos? Y luego un criterio de desempate igualmente absurdo, con un “orden de importancia” de insectos pero sin decir cuáles vamos a escoger: ¿de los que más tengamos? ¿Miramos simplemente el más alto que hayamos conseguido? Si nuestra combinación es de insectos distintos, ¿cómo se puntúa eso? Hay, al menos, que reconocerles el mérito de conseguir hacer tan confuso un reglamento de dos párrafos, que no todo el mundo es capaz de algo así.

Mai teilor is rich.

Mai teilor is rich.

Pero lo que más me molesta hasta el punto de parecerme directamente ofensivo y dañino para la afición (aparte de que la traducción al inglés de manual y caja se la hayan mandado como deberes a un niño de primaria) es que intenten colarlo como material educativo, teniendo las santas narices de plantar un párrafo que habrán copiado de otro juego o de un paquete de cereales, porque en un juego de este tipo, con todos sus fallos, ni siquiera mencionar la percepción espacial cuando hablas de que desarrolla las “habilidades comunicativas y sociales, que hacen posible la integración en cualquier grupo/contexto social” (cita literal de las instrucciones), es que tiene narices. A lo mejor es porque si juntas a cuatro niños a jugar esto van a comunicarse para ponerse de acuerdo en hacer cualquier otra cosa con tal de alejarse de semejante bodrio.

Te gustará si: te gusta que te tomen el pelo.

Lo odiarás si: pagaste por él. De hecho, incluso gratis es caro.

Juego proporcionado por Generación-X.

 

 

2 Comments on Frog Menu: ¿vas a comerte eso?

  1. Hay veces que pienso que reseñas para autoflagelarte… xD

    ¿Es posible que los puntitos de las fichas sean braile?

    • Algunos me llamarían héroe por jugar a según qué cosas. Pero alguien tiene que sacrificarse para ahorraros el sufrimiento a los demás 😉

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