¡Cobardes! – ¡Por la gloria de mi madrerl!
Paco Gómez, 2017 – Tranjis Games

¡Fistros, pecadores!
Y ahora que ya me he quitado de encima las referencias a Chiquito de la Calzada, puedo comenzar la reseña. ¡Cobardes! es la última apuesta de Tranjis Games, que ya se nos había estrenado con Virus! y nos dio una alegría con una edición requetechula de uno de mis juegos de destreza favoritos, Mondrian. Esta vez han decidido apostar por un juego para dos jugadores en el que vamos a pelear por la corona de un rey muerto sin haber dejado muy claro el asunto de la sucesión. Un Juego de Tronos en cinco minutillos, vamos.
Y sí, he dicho cinco minutillos, que es lo que se tarda en jugar. El mecanismo básico del juego va así: cada jugador tiene una mano con cartas de valores 0 a 6, y cada turno ambos jugadores juegan una carta boca abajo, para luego revelarla: si uno de los dos supera al otro por dos puntos o más, ha ganado la ronda. Si no, se dejan esas cartas sobre la mesa y se sacan otras dos, y así. El primero en ganar tres rondas, o en ganar a un jugador que haya jugado su carta “0”, gana la partida.
Que puede que os parezca una chorrada, y no os voy a quitar razón: las jugadas son más o menos automáticas, y al no tener ni siquiera el mecanismo “el 0 gana al 6” de juegos como Stratego, la emoción es bien poquita. Pero tranquilos, que no se mueva nadie, que viene la caballería: además de estas siete cartas, cada ronda tendremos a nuestra disposición una carta de cortesano boca arriba que podremos activar para conseguir una ventaja concreta en ese turno, y una de villano boca abajo que podremos jugar como si fuera una de nuestras cartas básicas y que también tiene un efecto especial al jugarla. Y el resultado, una vez metemos estos dos factores es… La misma poquita emoción, aunque con una pizquina de variedad.
El problema con estas cartas de cortesanos y villanos es que en realidad no añaden demasiado en cuanto a decisiones. Si tienes un cortesano que suma +1 al valor de tu carta una vez, pues tienes una vida extra (puedes permitirte jugar el 4 en el primer turno en lugar del 5 sin arriesgar nada, bien por ti). Si tienes una oveja que tiene valor 1 y punto, sólo te queda cruzar los dedos y jugarla cuando creas que el otro va a plantar su carta de villano para cambiársela. No busquéis aquí la variedad de Cosmic Encounter.

No puedo enfadarme con ella. No es su culpa.
Y podríais decir que ahora es cuando toca liarme a martillazos con el juego, pero hay un pequeño detalle que, si no tengo en cuenta, no le voy a hacer justicia, y es que ¡Cobardes! no está hecho para mí.
En Tranjis tienen muy claro que a la hora de poner un juego en las estanterías, hay dos caminos: sacar juegos que gusten mucho a pocas personas, o juegos que les parezcan simpáticos a muchas, y los que van a vender son estos últimos. ¡Cobardes! es el típico juego que se saca del bolsillo, se enseña, se echa una partida y se piensa “ah, pues está gracioso esto; ¿cuánto cuesta?”, se ve que cuesta cuatro perras y oye, para jugar tres veces y regalárselo al sobrinito ya vale. Las cartas son de buena factura y las ilustraciones muy vistosas, con Paco Dana demostrando otra vez que sabe cómo añadirle valor a un juego.
Si tu concepto de juego para dos jugadores es Star Wars: Rebellion o incluso Patchwork, ¡Cobardes! se te va a quedar cortísimo. Por otra, si quieres que cuando le expliquen el dilema del prisionero a tu peque ya le suene de algo o un modo rápido de decidir a quién le toca bajar la basura, aquí tienes una opción bonita y barata, y dos de tres ya es algo.
Recomendado para: pequeñajos y aquellos que busquen una alternativa al piedra-papel-tijera.
Juego proporcionado por Tranjis Games.
Suena parecido a Brave Rats
La clave creo que es si el juego esta dentro de tus gustos o no. Es cierto que acaba cansando y más si juegas con el mismo rival, pero a mi me encanta como filler para esperar a otro jugador, lo más probable es que no siempre se retrase el mismo (por lo que cambias e adversario) Mecánicamente funciona fenomenal y para introducir a los peques esta genial. Eso si, si buscas algo más, poco hay